Dentro de mi

Quise saber lo que te pasa en tu interior, mi memoria se remonta en los momentos que buscabas trabajo para mantenernos, en tus manos siempre el cubo de pintura, tus rodillos y brochas. Siempre vi en ti un hombre trabajador y a la vez duro. Tu niñez no había sido fácil, con tan solo 9 años trabajabas con tu padre en el campo, y solito en un tren subiste para venir a Barcelona. Siempre con una mirada sabíamos cómo nos teníamos que comportar, aprendimos de ti el esfuerzo del trabajo. Siempre cantando mientras arreglabas los pájaros y con tan solo oírte como te cantaban. Pintor de brocha gorda, pulidor, recadero, hasta un bar llevaste y camillero, miro hacia atrás y te veo por aquellos pasillos, siempre firme y con andar seguro. Nuestros caracteres son tan parecidos, que a menudo discutimos, creo que es por lo mucho que me quieres. Tras morir mama dejaste tus pájaros, te encerraste en ti mismo y el Parkinson apareció. Tu caminar se ha vuelto lento, y veo a un niño indefenso que lucha por seguir, sumido en tus pensamientos y en tu lento hablar. Mi corazón se encoje al verte pasear. Papa quiero que sepas que te quiero mucho. Y que dentro de mi quisiera hacer más y aunque me llames pesada, solo te quiero animar, aunque por dentro esté rota de dolor, aunque las fuerzas me flaqueen. Seguiré siendo tu pesada, no quiero que nunca lo olvides. Te quiere Mucho tu hija María Del Valle ¡Animo! Padre.

Un beso os quiere Mari.

Para mi padre.